Buenos días a todos/as:
Como primera entrada en el blog de nuestra web, quiero tratar un tema con el que, en nuestro día a día profesional, nos encontramos de una forma
habitual. Se trata de que a un cliente siempre se le plantea la duda de si elegirá un momento idóneo para vender o para comprar una propiedad.
Bien, podemos estar esperando eternamente a que ese momento llegue, pero la espera puede resultar, en muchas ocasiones, perjudicial para nuestros
intereses como actores dentro del mercado inmobiliario. No es nunca el mejor o peor momento para hacer una operación. Simplemente es TU MOMENTO. Nada más.
Si me espero a que el mercado baje compraré más barato. Más barato no quiere decir mejor. Puede que en esa espera por comprar más barato, pierdas
oportunidades de compra de propiedades que seguramente pudieran interesarte más que la que definitivamente adquieras. Por lo tanto, no es sólo el
precio. Hay otros factores igual de importantes a la hora de tomar una decisión tan importante en la vida de cada uno de nosotros.
En la misma tesitura te encontrarás si en tu cabeza ronda la idea de vender un inmueble. ¿Es mejor esperar porque los precios subirán o cierro una operación
cuanto antes y no corro riesgos? Pues bien, siendo conservadores, que es una actitud que todo el mundo debería tener en una situación de estas, salvo que
seas un gran inversor que arriesgue su patrimonio y puedas permitírtelo, lo lógico es cerrar dicha operación y no esperar a periodos más inciertos. Ninguno
sabemos a certeza lo que nos deparará el futuro. Es más, el vender hoy, puede permitirte llevar a cabo proyectos que tengas pensados. De otra forma, puede que
estos proyectos se vean truncados o sea más difícil llevarlos a cabo.
Por tanto, no es cuestión de buscar el mejor momento, si no de buscar TU MOMENTO.
Espero serviros de ayuda.
Alberto Moreno